Con un espectacular concierto con el que puso a bailar y cantar a unas 30 mil almas, Shakira se despidió anoche de México durante su último concierto ofrecido en esta ciudad y con el cual cerró su gira mundial "Sale el Sol tour world".
La colombiana hizo gala de su voz y presencia, y puso a vibrar el Estadio Universitario, con un escenario que incluyó una pasarela de unos 16 metros de largo colocada al centro de la cancha, mediante la cual se mantuvo en contacto con el público al que entregó lo mejor de ella, como lo prometió al principio de su "show".
Sin grandes retrasos como ocurrió con sus anteriores presentaciones en la Ciudad de México y Guadalajara, Shakira, sorprendió a los regios cuando apareció caminando a un costado del escenario, a nivel de cancha, saludando al público envuelta de la cabeza a los pies con una túnica rosa.
Entonando las primeras estrofas de "Pienso en ti", la cantante se impuso desde el principio, y tan pronto subió al escenario se despojó de la túnica para descubrir que estaba vestida con un pantalón entallado negro y top dorado para iniciar su recorrido musical con "Años luz" y luego entonar "Te dejo Madrid", que hizo a todos saltar de sus asientos y acompañarla en coro.
"íBuenas noches, Monterrey!", fueron las primeras palabras con las que saludó a los regios con quienes se reencontró, tras cuatro años de ausencia, cuando visitó la ciudad también en este recinto, como parte de su gira "Fijación oral".
Bajo un calor extremo que superaba los 30 grados centígrados, el público se rindió ante la artista, quien dijo estar feliz de reencontrarse con el público. "Estoy feliz de estar con ustedes, mi único deseo es que se la pasen bien".
"Monterrey, esta noche soy toda tuya", subrayó, para luego interpretar "Si te vas", con la que el público la acompañó de principio a fin sin parar, hasta continuar con "Suerte", donde se hizo acompañar de cinco jóvenes a quienes subió a la pasarela y puso a bailar con ella.
"Cadera, cadera", decía, mientras enseñaba a las jóvenes cómo moverse al ritmo de la música, y para quienes fue una total sorpresa y emoción que demostraron abrazando a la cantante, quien se mostró siempre afable y sencilla.
El tiempo se remontó años atrás y se volvió romántico, cuando con guitarra en mano recordó el tema de "Inevitable", que dio pie luego a la presencia de una bailarina, mientras la cantante se transformaba en una "Gitana", que bailó y cantó al mismo tiempo acompañada de un guitarrista y un violinista.
Vestida con falda larga de varios olanes y con una blusa plateada, Shakira ofreció su baile con el característico movimiento del busto y aderezado de pasos flamencos, antes de desaparecer su falda y regresar a sus pantalones negros para bailar "La tortura".
Descalza y con un público animado que la seguía en todos sus temas, los ánimos se elevaron al máximo al recordar su "Ciega, sordomuda", haciendo erupción el "Volcán", como se le conoce al Estadio Universitario que se iluminó de luz amarilla simulando un amanecer cuando se escuchó la música de "Sale el Sol".
"Hay muchas noches que parecen largas", dijo la colombiana, al interpretar el tema alusivo a su gira mundial, que inició en septiembre de 2010 por diversos países como Canadá, Estados Unidos, España, Francia, entre otros, y luego comenzar con su visita al país.
Acompañada de dos bailarinas apareció con un nuevo cambio de vestuario, ahora de pantalón verde con manchas café y sostén negro con piedras, para interpretar sus éxitos más recientes como "Loca", "La loba" y concluir este bloque con "Ojos así", con el cual hizo gala de sus movimientos de cadera y busto.
Aunque se quiso despedir alrededor de las 23:15 horas, tuvo que regresar, pues no podía faltar su "Hips don´t lie" y concluir con el mundialmente famoso "Waka waka", con el que finalmente se despidió de los regios que la esperaron por varias horas en que disfrutaron de varios artistas dentro del Pop Festival, como Benny Ibarra, Jarabe de Palo y Belanova, entre otros.
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